Si quieres ahorrar tiempo y/o dinero, dar prioridad a una alimentación sana y estás cansada/o de tener que esforzarte todos los días para llevar una comida a la mesa, puedes probar el batch cooking.
Batch cooking significa “cocinar en lote”, y es una técnica que se utiliza en la cocina para ahorrar principalmente tiempo en la preparación de los alimentos. Consiste en hacer cierta cantidad de un mismo alimento o ingrediente que puedes utilizar como componente en las comidas de varios días.
En lugar de preparar la cantidad de alimentos que necesitas para una comida, preparas un lote grande y luego lo divides en porciones que puedes utilizar cada vez que necesites. Por eso tiene sentido, por ejemplo, preparar medio kilo en una sola cocinada y utilizarlo en recetas a lo largo de la semana o congelarlo para utilizarlo en el futuro.
3 Aspectos a Cuidar a la Hora de Hacer Batch Cooking
1. Evitar contaminación cruzada en la preparación
Con esta técnica, lo que buscamos es cocinar 1 o 2 veces a la semana para tener comida durante varios días porque quizás no disponemos de tiempo (o eso pensamos), por lo que debemos tomar en cuenta que uno de los riesgos del batch cooking es la contaminación cruzada en la preparación. Quiere decir que si vamos a cocinar, por ejemplo, una carne y al mismo tiempo tenemos la cocina ocupada con otros ingredientes que vamos a preparar, la manipulación entre alimentos puede contaminar, poniendo en mayor riesgo a aquellos que vayamos a consumir crudos, es decir, que no vayamos a cocinar después de prepararlos, por decir, lechugas, verduras, frutas, etc.
Si la manipulación de varios alimentos a la vez supone un riesgo, debemos tener en cuenta la constante higiene de nuestras manos, superficies, y del menaje, es decir, tablas, cuchillos, y demás utensilios. Durante el batch cooking, la preparación tiene que ser impecable para evitar cualquier tipo de contaminación cruzada.
2. Almacenar de manera adecuada en recipientes herméticos
Cuando ya hemos cocinado y vamos a almacenar la comida, debemos tener presente hacerlo de la manera adecuada.
Lo primero que debemos hacer es tomar en cuenta que la comida preparada no debe pasar más de 1 hora sin refrigeración para evitar la propagación de microorganismos no deseados que puedan dañarla.
Por otro lado, es recomendable no preparar comida para más de 3 días, por lo que sería conveniente hacer batch cooking al menos 2 veces a la semana; si esto no te resulta conveniente y quieres preparar comida para más días, lo mejor es congelar por porciones, tomando en cuenta que almacenar de manera adecuada los alimentos es igual de importante que la preparación.
Puedes guardar la comida por porciones en el refrigerador o en el congelador, dependiendo del tiempo en que la vayas a consumir. Si consideras que algunas de las porciones van a pasar más de 3 días en refrigeración, es mejor congelar desde un inicio. Además, porcionar es muy útil para calentar únicamente aquello que se va a consumir en el momento.
Es recomendable pensar en recetas que se conserven bien congeladas, así el día que cocinas, puedes hacer una cantidad más considerable para tener suficiente por 1 o varias semanas. Cuando lo has hecho unas cuantas veces, encontrarás esas comidas que se conservan bien al descongelarlas.
3. Cuidar desde la preparación hasta el consumo de los alimentos
Ya sea que no se preparen, no se enfríen, no se conserven o no se calienten adecuadamente los alimentos, tenemos riesgo de que se desarrollen microorganismos no deseados, incluso en alimentos que regularmente no pensamos que puedan causarnos estos problemas, como fideos o arroz, por lo que es importante tomar muy en cuenta el cuidado en cada paso, desde la preparación hasta el consumo de los alimentos.
Consejos Para Tener una Mejor Experiencia Haciendo Batch Cooking:
- No pretendas hacer todas las preparaciones del menú (desayunos, refacciones, almuerzos, cenas), en una sola sesión de batch cooking, eso te agobiará queriendo hacer todo de golpe.
- Haz tu planificación de menú de batch cooking con anticipación, para poder tener todo lo necesario el día de la elaboración y saber exactamente lo que vas a preparar, créeme que esto te ahorrará mucho tiempo. Además, de esta manera, también puedes desinfectar todo junto. Incluir más frutas y vegetales en nuestra alimentación puede ser uno de los beneficios del batch cooking, practicando una alimentación más saludable, y acorde a los objetivos que cada uno de nosotros tengamos respecto a nuestra alimentación.
- Teniendo preparadas las comidas, puedes guardar por porciones según tus necesidades, y almacenar en recipientes herméticamente cerrados. Lo principal que necesitarás en el batch cooking (y en el meal prep) son recipientes para almacenar que sean aptos tanto para refrigeración como para congelar alimentos, preferiblemente de cristal, de todos los tamaños a los que tengas acceso.
- Recuerda que es importante ir variando los alimentos que prepares en el batch cooking, para no caer en el aburrimiento ni mucho menos en algún déficit nutricional. La idea de poder preparar los alimentos en casa utilizando esta técnica, es que ahorres tiempo y presupuesto, cumplas con tus objetivos alimenticios, y por último, pero no menos importante, ¡que los disfrutes! La alimentación intuitiva sugiere que el factor de satisfacción es de los más importantes a la hora de comer. Puedes saber más sobre esto en: Alimentación Intuitiva: La No-Dieta Que Te Cambia La Vida.
- Dado que alimentos como las legumbres pueden tomar un poco más de tiempo en su elaboración, es recomendable que hagas una cantidad que alcance para más de 1 semana, puedes preparar, separar por porciones y meter en el congelador las que no vayas a consumir inmediatamente.
Batch Cooking no es lo Mismo que Meal Prep: Parecidos Pero Ligeramente Diferentes
El batch cooking y el meal prep tienen aspectos similares pero también distintos, por lo que no son lo mismo. Batch cooking, traducido del inglés significa “cocinar en lote”, y meal prep significa “preparación de comidas”, por lo que de entrada podemos ver la diferencia entre estos dos conceptos de preparación de alimentos.
En ambos métodos, se cocinan varias cosas a la vez. La diferencia es que en batch cooking se guardan cada uno de los alimentos por separado, por decir, los alimentos «a», «b» y «c» se guardan por separado en recipientes, lo cual da la libertad de armar posteriormente diferentes combinaciones de menú en el plato. En cambio, en el meal prep, se guardan menús ya racionados, por decir, en un recipiente hermético se guarda una porción de la comida “a”, “b”, y “c”, quedando listo para únicamente sacar del refrigerador y calentar -incluso en el mismo contenedor.
Por decir, el batch cooking consiste en preparar los componentes que se utilizarán en diferentes comidas, y el meal prep, por otro lado, implica planificar las comidas y prepararlas todas a la vez (o simplemente saber qué hay en el menú cada día). Es posible que acabes utilizando los componentes que preparaste en el batch cooking en las comidas que has planificado para el meal prep.
EN OTRAS PALABRAS
En el batch cooking no se preparan comidas completas, sino alimentos que estarán listos y disponibles cuando los necesites. Los alimentos pueden estar cocidos o crudos, y luego se mezclan y combinan según las preferencias personales.
En el meal prep las comidas o platos completos se preparan desde cero con anticipación y luego se guardan en recipientes individuales listos para consumir.
Aunque ambas técnicas pueden ser muy útiles, en mi experiencia, el batch cooking resulta más fácil de integrar a nuestra vida diaria, ofreciendo los mismos beneficios que el meal prep hablando de tiempo, esfuerzo, y nuestros objetivos de alimentación.
Por otro lado, si bien el batch cooking es una herramienta con muchos beneficios, también debemos tomar en consideración algunos riesgos que pueden haber a la hora de practicarlo (que también pueden ser aplicables en el meal prep).
AVISO IMPORTANTE
Esta información no es presentada por un médico y es únicamente con fines educativos e informativos. El contenido no pretende ser un sustituto del consejo, diagnóstico o tratamiento médico profesional. Siempre busca el consejo de tu médico u otro proveedor de atención médica calificado con cualquier pregunta que puedas tener con respecto a una condición médica. Nunca ignores el consejo médico profesional ni te demores en buscarlo por algo que hayas leído.